Moca.Los reclusos de la Fortaleza Dos de Mayo de esta ciudad, se movilizaron en el interior de sus celdas en un intento por amotinarse luego del traslado de ese recinto penitenciario de dos internos que guardaban prisión acusados de tráfico de drogas y de homicidio.
Los reos Wendy de Jesús Polanco, y Manuel de Jesús coronados fueron conducidos a la cárcel 15 de azua, por disposición de la dirección General de prisiones según lo confirmaron el coronel Mercado Sosa encargado de la fortaleza y el alcalde de esta Teodoro Lizando, lo que provocó la reacción de los reclusos.
Mercado confirmó que siete reos fueron llevados a celdas solitarias pero no hubo mayores inconvenientes por la rápida acción de los militares, sin embargo en el recinto se percibía gran hermetismo y tensión.
Las razones del traslado no fueron reveladas, sin embargo este se produjo luego de que en horas de la mañana de hoy, el presidente de la Unión de Juntas de vecinos del Municipio de Moca, Juan Morris Duran denunciara a través de varios medios de comunicación local, que en la referida fortaleza habían excesos de privilegios con reos vinculados al narcotráfico.
Morris aseguró que en esa fortaleza había reos que salían en horas de noche y que manejaban negocios dudosos desde el interior de la cárcel, información que desmintió el alcalde Teodoro Liranzo quien además pidió a las autoridades realizar las investigaciones de lugar para aclarar ante la opinión pública la situación de Moca.
El Coronel Mercado explicó que los reos revoltosos son miembros de la temida banda de delincuentes La 42 que opera en este municipio y de la cual Wendy es su cabecilla. Wendy lleva un mes y siete días recluido en el recinto acusado de tráfico de drogas, este había sido apresado en reiteradas oportunidades acusado del mismo delito, pero siempre ha logrado su libertad bajo fianza. Manuel de Jesús cumple condena acusado de homicidio tenía dos años en el recinto.
HIEREN RECLUSO EN RIÑA
Teodoro Liranzo informó que durante una riña ocurrida la semana pasada resultó herido el recluso Héctor de Jesús Baez, quien permanece interno en el hospital Doctor Toribio Bencosme de aquí. El reo se recupera de unas siete heridas que les fueron inferidas por un compañero suyo, con una especie de varilla, elaborada con unas sillas de metal que fueron introducidas al recinto para impartir clases en un programa de formación que se ejecuta para educar a los internos.
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