“El estado es ilegítimo y su constitución también, no se puede ser parte de él y ser serio. Las normas de las cual hablas son las mismas que nos tienen en un estado de zozobra. Tenemos que erradicar el sistema y todos los que quieren ser parte de él. El que se esté vendiendo temo que es sospechoso.” Luis A. Monclus
Luis es un amigo en Facebook que reside en New York y defiende “Vote por Ninguno”. Quiero aprovechar su planteamiento para explicar que los sistemas democráticos a lo cual aspiramos, no son malos por sí solos, la verdad es que los sistemas de gobiernos actuales, en su mayoría, por su concepción de filosofía y principios, son buenos. El problema está en sus integrantes, los actores de cada sistema, que son los que deciden actuar bien o mal a favor de las mayorías casi siempre ignorantes o de las minorías (en gran parte corruptas) que por lo general son las élites de los gobiernos asociadas a los sectores de poder económico.
La solución a este problema es fácil: crear conciencia ciudadana, despertar al pueblo que duerme en la ignorancia y el clientelismo de la politiquería barata y corrupta en perjuicio de las clases trabajadoras y pensantes, así como de las masas, los más desposeídos. No creo en los inmaculados, son excluyentes y eso nunca ayudará a resolver los problemas.
No comparto la violencia, pero me sumo a la “Desobediencia Civil” creo que es tiempo de que los ciudadanos y el pueblo en su conjunto se unan, nos cohesionemos para imponer el poder, el verdadero poder que reside en el pueblo y que debe estar por encima de todo gobierno.
Reivindiquemos y sigamos la filosofía de Henry David Thoreau, “Desobediencia Civil” que siguieran Mahatma Gandhi y Martin Luther King; despertar un pueblo demanda de mucho amor por la patria, gratitud y devoción a nuestros héroes libertadores: Los Trinitarios y Los Restauradores, que dieron la vida para hacer posible el proyecto “República Dominicana” que aun sigue inconcluso.
Lo cierto es que los Estados necesitan de algún sistema de gobierno que administre los recurso públicos y organice la sociedad, fiscalizando a través de normas y proporcionando ciertas garantías o garantías mínimas.
Un Estado está compuesto por una población, un gobierno y un territorio. Para que funcione debe establecer normas, como la más importante su constitución. Estemos o no de acuerdo debemos respetar los sistemas de gobiernos y exigir que el gobierno respete sus ciudadanos, al pueblo.
Para cambiar los sistemas hay que participar favoreciendo alguno. Los tiempos actuales no permiten a los habitantes vivir y desarrollarse como nómadas. Por eso le propongo a los inscritos en “Vota por Ninguno” castigar a los malos candidatos, dar seguimiento y evaluar a toda la matrícula de candidatos, y a los que no se merecen representarles explicar el por qué, denunciarlos y oponerlos. Y promover a aquellos que entiendan cumplen con sus demandas o representación.
“Votar por Ninguno” es una propuesta interesante, pero para ser incluida necesita quién la defienda en el congreso y yo quiero representarles usando la conciencia, por lo que le solicito reflexionen y ponderen promoverme como su representante.
También quiero representar, como su diputado, a todos aquellos que se sienten burlados, traicionados, defraudados, engañados, disgustados, inconformes, discriminados, que odian los políticos, que no son escuchados, que se sienten excluidos, a los jóvenes confundidos. Y sobre todo al pueblo en general, al ciudadano común, pues las élites privilegiadas y corruptas tienen suficiente representantes quienes visten de traje, cuello blanco y corbata.
Quisiera enfocar algunos planteamientos que me han preocupado siempre. Entiendo que un diputado tiene tres responsabilidades principales: legislar, representar y fiscalizar. Sin embargo, la República Dominicana hay muy pocas leyes que proponer; por eso, hacer nuevas leyes no debe ser prioridad. No es que no tenemos proyectos interesantes o importantes para proponer, así como una ley que promueva el primer en empleo y otra que obligue la revisión de toda la normativa cada cierto periodo. Pero como diputado, trabajaremos para fortalecer el cumplimiento de las normas establecidas.
Pero mi prioridad irá encamina a que se hagan cumplir dichas normas y todas las leyes en la República Dominicana, porque el principal problema de la sociedad es que los funcionarios no cumplen ni dan el ejemplo para que se cumplan las leyes que ellos mismos sancionan y en eso enfocaremos nuestro mayor esfuerzo, en denunciar y someter a la justicia a todos aquellos funcionarios y legisladores que dan el mal ejemplo violentándolas, vendiéndole su voto y su libre determinación al mejor postor. Lamentablemente la sociedad dominicana en su sistema “democrático”, está permeada por la corrupción y el crimen organizado.
Es una de las razones por la que hemos aspirado a llegar al congreso, a fin de convertirnos en un verdadero defensor del pueblo, un actor que ha quedado fuera de la acción política de la República Dominicana y del sistema, como equilibrio de justicia en defensa de los ciudadanos. Queremos llegar al congreso para llenar ese vacío de falta de responsabilidad, de valentía, de honestidad, de ética y de moral en dicho poder del Estado.
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