Frecuentemente escuchamos decir que a nadie le gusta pagar impuestos. Algunas autoridades municipales no quieren cobrar “para no perder popularidad”.
Sin embargo, la realidad es otra. Quienes no cobran impuestos, tienen menos posibilidades de resolver los problemas de la comunidad, ya que los recursos disponibles son limitados, y por tanto, se corre más riesgo de “perder vigencia política”. La experiencia enseña que el problema no es de cobrar los impuestos; el problema es, no usar esos recursos para resolver los problemas de las comunidades.
Las gestiones exitosas cobran impuestos municipales, cada vez más, pero invierten los recursos provenientes de estas fuentes en el financiamiento de obras y servicios municipales o para resolver los problemas de la comunidad.
Así mismo, informan oportunamente por vía de murales, periódicos locales, la radio y la televisión, respecto del uso dado a dichos recursos.
Algunas autoridades municipales temen ofrecer participación a la ciudadanía, porque creen que quienes participan desean sustituirlos o tienen miedo de los conflictos que puedan generarse. A veces, también se piensa que ser transparente, perjudica la gestión y por eso no se ofrece información a la ciudadanía.LACHIQUITA.COM
lunes, 22 de diciembre de 2008
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